Solos... última parte de solos en mi casa.

Después de una gran pasión ambas almas se encuentran solas, ya la una sin la otra.

Solos… última parte de solos en mi casa.

Después de este primer encuentro vinieron otros muchos ratitos de esos que esperas impacientemente y que cuando llegan te parecen tan cortos. La pasión se desataba, aprendíamos a entendernos sexualmente. Apenas hacían falta palabras para saber lo que cada uno quería… No era solo penetrar, el juego ardía en nuestros corazones.

A menudo sentía que necesitaba decirle lo mucho que ya lo quería, y eso que hacía tiempo que no podía decirle a nadie esas pal...

Solos en mi casa...

Dos personas que se encuentran y buscan la una en la otra algo que les falta en su vida. Lo dificil es el final...

Solos en mi casa, sentados en un gran sillón. Empezamos hablando de tonterías, cosas simples. El se iba acercando cada vez más, me miraba sin parar. Yo me aturdía porque no daba crédito a lo que iba a ocurrir. Quizás fuera falta de costumbre, quizás inseguridad mía. En un par de veces tocó mi pierna y a mí fue como darme electricidad. Lo cierto es que lanzó su boca sobre la mía. Casi no tuve tiempo de reaccionar porque lo deseaba tanto

Una y otra vez sin separarnos, nos besábamos. Besos fuertes,...

Una tarde con Cecilia

Hacer el amor con Cecilia fue hermoso, su cuerpo desnudo...

Aquella tarde de primavera había sido muy esperada por mi. Finalmente, luego de tantas semanas de postergaciones, quedamos en encontrarnos con Cecilia, nombre por el cual yo la conocía, no se si es el verdadero o no, pero la verdad es que eso era lo que menos me importaba.

Cecilia había sido compañera de un trabajo hace ya casi tres años, y en el período en que trabajamos juntos logramos establecer una relación entre nosotros bastante agradable. Nunca habíamos tenido sexo, pero llegamos a hablar...

Cada noche

Carta a la mujer que ha perdido la pasión. A veces, el tiempo es el peor enemigo de una pareja.

"Descubrieron que los besos, no sabían a nada"

(Joaquín sabina, "Ruido")

Salgo del baño un poco más relajado. Hace tiempo que a lo máximo que aspiro es hacerme una buena paja antes de irme a la cama. Le estoy cogiendo de nuevo el truco, como en mis años de chavalín pajillero lleno de granos, pero al mismo tiempo pienso que la satisfacción obtenida es más bien poca sin el roce de tu piel.

Pasan las dos de la madrugada. Mañana tengo que levantarme temprano, pero hay algo que me quita el...

Entrega voluptuosa

Una noche lluviosa y la entrega más apasionada de una pareja que se olvida de emparedados y refrescantes bebidas.

RELATO 19

Entrega voluptuosa

ECSAGARDEZ

La noche era lluviosa… Habían decidido quedarse en casa y disfrutar de una película en DVD que habían alquilado y que tenía mucha acción y algo de erotismo… Por lo que luego de prepararse unos emparedados y algo de botana, así como abrir dos refrescantes coca-colas, se dirigieron a la sala para encender los aparatos y disfrutar el filme

Raúl y Fabiola eran una pareja muy unida, nada enturbiaba su felicidad luego de 15 años de matrimonio y...

Juventud o inocencia

Relato poético y cursi...

Juventud o inocencia.

No se que es mas radiante, si tu juventud o tu inocente sensualidad. El gesto alegre y enigmático de tus carnosos labios, tu mirada esquiva y distraída que... atrae mi curiosidad por indagar, saber qué te propones. Jugueteas apoyando tus talones, abriendo y cerrando las piernas, mostrando -descuidadamente- tu pubis. Luego bajas tu mano y cubres -púdica- el centro de mis deseos. Sonríes, mirando hacia el cielo raso, cruzas una pierna sobre otra y pones tu brazo en tu regazo....

El placer de recibir placer

Nunca es posible imaginar, lo placentero que puede ser recibir el amor de alguien que amas.

El placer de recibir placer

Estábamos los dos estirados en la arena, mis labios acariciaban los suyos por encima con miradas discretas a sus ojos qué aun denotaban el placer qué le proporcioné. Verla de esa manera hacía que mi cuerpo necesitara algo, algo que sólo ella podía darme.

Cuando estuvo repuesta me miró fijamente a los ojos, con una mirada de tigre, decidida a atacar, pero por debajo de su nariz asomaba una sonrisa pícara. Sin decirme nada me agarró por la cabeza, y me acercó a sus...

Un helado de nata

La misma situación contada tal y como cada uno la sintió. La primera parte, escrita por él y la segunda por mi.

  • UN HELADO DE NATA -

Desde los ojos de E.G

Durante todo el día había estado pendiente del reloj que se empecinaba en no andar.

Había quedado con ella a las 6 de la tarde para tomar un café y no quería admitir que estaba nervioso. ¿Nervioso yo? No, nada de eso, si acaso impaciente.

Pero todo llega y allí estaba ella, sentada frente a mí en aquella cafetería. Nos habíamos saludado con un leve roce en los labios y ahora yo la miraba mientras hablaba.

Se había quitado la c...

El placer de dar placer

Ella, es el objeto de mis caricias, el objeto a quien quiero dar todo el placer del mundo.

El placer de dar placer

Mi primer relato en esta web, os contaré una experiencia vivida en una playa de la ciudad donde vivo.

Todo empieza cuando nos encontramos en al paseo al lado de la playa, ella llevaba un peinado recogido con una goma, haciendo resaltar su bonito rostro, con esos ojos, con esa mirada pícara, y esa sonrisa deslumbrante a cada gesto de su cara. Vestía con una camiseta de tirantes blanca, dejando un escote por donde se podía apreciar la curva de sus pechos ajustados. De...

La bella señorita Lunes

Mi bellísima amante de los lunes.

Los lunes eran de Helena, una querida amiga que estudiaba la maestría en historia del arte en la Ibero. Tenía 26 años y era una belleza clásica, de larga y ensortijada cabellera azabache, grandes ojos negros que brillaban sobre una blanca cara de barbilla en punta. Su cuerpo era de medidas perfectas y estilizadas y era un poco más alta que yo.

Tres meses antes, saliendo de un evento académico, cenamos juntos y terminamos en el pequeño departamento que entonces rentaba, pero esa es otra historia....