Dominación en Valencia (10)

Continuación del día que pasé a solas con las hermanitas. En la playa obedecen sin tener obligación de hacerlo; y en casa se lo agrdezco.

Capítulo 10, continuación del día con Ana y Pilar.

Ya me había bebido una cerveza bien fría, en el restaurante donde íbamos a comer las dos hermanas (Ana y Pilar) y yo. Quería hablar con Ana sobre el incidente del coche y su falta de respeto hacía mí.

Yo.- Ana, lo de esta mañana en el coche, hay que aclararlo. No te voy a consentir que cuestiones mis actos. Sigues teniendo la palabra mágica, que me haría detener cualquier cosa, que esté haciendo. Pero excepto en ese caso, como vuelvas a fal...

El paréntesis (3)

Patricia no era mentirosa, cuando ella decía que algo dolía es porque dolía.

Decidí que me quedaba, pero, le advertí que no tenía todo el tiempo del mundo porque debía ensayar la misa del domingo. "Claro", añadí, "siempre puedo ir y volver, si tu quieres".

Ella me calló diciendo que si teníamos poco tiempo no era razonable perderlo hablando, me cogió del pescuezo y tiró hasta que me colocó sobre sus piernas, como si me fuera a azotar en el trasero, en vez de eso agarró la parte de la zanahoria que salía y comenzó a moverla lentamente, la sacaba algo, la metía y se reía d...

Captura y Venta de Esclavas (1: La Captura)

Rogelio tenía como medio de vida la captura para su posterior venta como esclavas. Por algún motivo fue publicado primero el Capítulo II y espero que ahora se publique el I.

Captura y Venta de Esclavas. (I) La Captura

El siguiente relato, de ficción como todos los que he escrito, está especialmente dedicado a quienes me han hecho llegar su gusto por la lectura de mis relatos, lo cual agradezco enormemente ya que mi profesión está muy lejos de la literatura.

Algunas de esas personas son: Mfatal, Abigail; Itzel200; Sifaxnumida; Nenatierna y Marieta.

Espero que los detalles que más abajo expongo puedan satisfacer sus fantasías y no resulte demasiado pesa...

Burdel de esclavas

Esclavas, amos que las ceden por dinero? Un burdel, caprichos de los clientes, sometimiento, humillación, abusos... madama que castiga si no es suficientemente complaciente...

Al bajar las escaleras del salón veo que llevas un ceñido maillot negro, desde el cuello a los tobillos. Dependiendo de la luz que te dé es completamente opaco o totalmente transparente; además está abierto entre las piernas lo que permite ver el culo y el sexo depilado y anillado, los pechos salen del maillot a través de dos orificios que los oprimen, viéndose congestionados.

-Me lo he hecho especialmente para ti, para estar accesible en todo momento.

-Estás muy excitante.

-Me gusta...

La esclava de Luis Giner (1)

La penosa historia de una joven obligada a ser esclava sexual.

LA ESCLAVA DE LUIS GINER PART. I

Luis Giner, "El Oso" como lo habían apodado en el cuerpo de policía desde hacía muchos años, se levanto de la cama, desnudo y con una tremenda erección. Se puso el pantalón del chándal y salió al jardín de su chalet a recibir al vehículo recién llegado.

Su apodo le venía como anillo al dedo cuando con 24 años ingreso en los antidisturbios. Era una mole de metro noventa con unos hombros que ocultaban el sol. Ahora tenía casi 53 años y su apodo de "El Oso" s...

Colegio de Monjas

Dos chicas juegan a atarse pero se llevaran una sorpresa.

Colegio de Monjas

Estudié interna en un siniestro colegio de monjas hasta los dieciséis. El único macho dentro de aquellos fríos muros era Segismundo, el viejo jardinero gordo, al que llamábamos "Segis" por delante y "el inmundo" por detrás, porque siempre tenía las manos manchadas de algo. Con tan poco para escoger era lógico que siempre estuviéramos pensando en los chicos… y que practicáramos todo tipo de juegos sexuales con lo único que había a mano, o sea, otras chicas.

Ni a mi amiga E...

Dominación en Valencia (9)

2 semanas después de mi hospitalización, me reúno con las hermanitas en su piso de estudiantes. Estaba lleno de leche y había que remediarlo.

Dominación en Valencia 9

Como podéis ver, no me morí en el anterior capítulo. Solo fue un susto que afortunadamente solo me mantuvo 4 días en el hospital; y que, gracias a que mi pareja estaba de viaje; ni se enteró.

En el hospital era la comidilla de los ociosos enfermos y de las coquetas enfermeras y auxiliares. Y mis tres ángeles, los culos más deseados de la planta de medicina interna. Tuvo que ser Pilar, la que convenció a mi maciza doctora, de que era cierto que había estado tres días...

Tamita... Sumisa por puro placer (2)

Cuando le pregunté a mi hijo Gabriel con quien chateaba, y el me dijo que era una compañera de su curso, mi mente fue más allá… Deseé conocer a esa niña. Por lo que había leído en la pantalla del ordenador… esa adolescente de 18 pedía un macho urgente!!! Y no me equivoqué… Sugiero leer la Primer parte para una mejor comprensión. Gracias

Una vez que el camarero tomó nota del pedido, Tamita se arrodilló entre mis piernas, ansiosa por cumplir con "la orden" encomendada… hacerme una buena mamada… en el bar…en un lugar público… expuesta ante la vista de quien pasase a nuestro lado y la observase.

Arrodillada, posó sus manos en mis piernas y levantó su cabeza para dirigirme una mirada de placer y éxtasis total… se la veía feliz

Ohhh… Emilio… no puedo creerlo aún… al fin alguien que se anima a darme el trato que tantas vece...

Rubí 5

¿Pero que estúpido, no que estaba muy bien educado eh, Rubí?— le dijo Rocío sin dejar de reír y limpiándose la mano en el cabello de Luis.

RUBI 5

Susana ya resignada intentó besar los bonitos pies de Rocío que lucían unas sandalias negras sin tacón pero ésta no la dejó y levantándola para quedar de rodillas ante ella le ofreció alimentos que le había llevado a escondidas y la abrazó; Susana entendiendo el gesto de Rocío entonces rompió a llorar y a deshagorse con la chica quien fue clara al decirle:

¡Calma Susana, calma y escúchame bien!, no puedo tardar mucho tiempo pero estoy contigo y todas las noches te traeré alimentos y...

Lo bueno si doble, cuatro veces bueno 2

Dos amos, cuatro esclavas. Empieza la acción.

Primer ciclo

OCTUBRE, 2006

1

El primer día de octubre amaneció claro y despejado, con un sol naciente que auguraba un día caluroso. Laura abrió los ojos mientras oía a su madre gritar por la puerta (el despertador llevaba sonando media hora pero ella ni se había enterado) y se levantó rápidamente. Tenía que darse prisa para llegar a clase. Recorrió su cuarto perfectamente recogido (a Laura le gustaba tener todo en orden) hasta llegar a su armario.

Laura odiaba los días calurosos...