La pasantía del sexo, mi nuevo empleo (2)
Caigo media atontada por la falta de aire, pero cuando me pregunta que me pareció, se escucha mi voz entre jadeos: Su placer es mi mayor placer amo
Yo seguía en el suelo llorando, media idiotizada, no entendía que es lo que estaba pasando, pero una cosa tenía clara: no volvería a preguntarle a Ignacio, no estaba dispuesta a recibir otro golpe por respuesta. Él se dio media vuelta y se dispuso a seguir durmiendo, mientras yo no me movía e intentaba encontrar una respuesta a la situación: una broma, una cámara oculta, una pesadilla, una confusión.
Estuvo unos minutos intentando volver a dormirse, pero al parecer no lo logró, porque se incorporó en...