Un duro día de trabajo
Hay días duros en el trabajo. Días muy duros. Pero si tu chica pone de su parte y sabe como animarte esa dureza se va a otra parte. Así es mi chica, capaz de convertir todo mi cabreo en excitación indomable. Y así es como descargo mi mala leche. "A mí no me la mamas, yo te follo la boca".
“Otro día de trabajo duro. Estoy reventado, y no pagan lo suficiente por tantas horas. Menos mal que ya estoy llegando a casa.”
El trayecto en el tren se hace eterno. Somnoliento y agotado, cerrándose mis ojos poco a poco, apenas distingo cuanta gente colapsa la pesada atmósfera del vagón. Una leve vibración en mi bolsillo me sobresalta del trance.
“¿Te falta poco para llegar? Me he arreglado un poco”
Aquella foto de mi chica disfrazada de colegiala me hizo recobrar todas las energías desp...