Palabras Mágicas 10
Howard cree que puede quedarse a Astrid para siempre. ¿Estará en lo cierto?
Las criadas al principio se horrorizaban, pero con el pasar de las semanas, terminaron a acostumbrarse a aquella mujer hedionda que recorría la casa, que comía como un animal y que se pasaba todo el día fornicando con el dueño de la casa. Todo sea dicho, no dejaba de ser una mejora con respecto a lo anterior. Howard estaba tan enfrascado con Astrid que ni miraba con deseo a las otras chicas como solía hacer antes.
Dentro de lo enfermo que todo resultaba, había un extraño statu quo que se mantenía y er...