Mi placer: compartir a mi esposa 3
Hablándole al oído le dije: -mira son nuestros amigos de la otra vez, ¿Los recuerdas?
La semana fue inquietante para mí, y a la vez larga, anduve arreglando los detalles con Roberto y Julián y para que mi linda mujercita estuviera a tono ese día, le compré un hermoso vestido que vi en un aparador, y sin consultarle solo se lo llevé. Era un vestido rojo, estrapple, o sea sin tirantes ni mangas, que le cubría desde la parte superior de sus pechos hasta medio muslo, de una tela suave que reflejaría sus formas, Le cubría la espalda una torerilla transparente color rosa, a juego con el vestido. L...