Juego de tres
No suelo escribir este tipo de historias pero esta simplemente surgió. Empezó como un relato gay que acabó en un juego bisexual muy pervertido. No soy experta en este tipo de sexo, así que tendrá fallos, pero espero que lo disfrutéis.
Siempre habíamos vivido en un pueblo y venirnos a la ciudad suponía un gran cambio para nosotros. Cuando nos trasladamos aquí mi hermano tenía 15 años y yo 13. Lo que más nos preocupaba era haber perdido el contacto con nuestros amigos y no tener aquí ninguno. Pero la verdad es que David, mi hermano, se adaptó bastante bien al cambio y conoció al que sería su mejor amigo, Javi. A mi me costó algo más adaptarme, pero he de reconocer que me fue de gran ayuda el tener a Javi cerca.
Pasaron los años y ocu...