Soy una pajera compulsiva II
Despertar diario de una mujer normal, pero su vicio con las pajas es digno de contar
07:00 AM
El despertador sonando, que pereza, pero hay que levantarse a trabajar, pero cinco minutos más en la camita no va a hacer daño a nadie. Y mi pajilla matutina no puede faltar. Voy a bajarme las bragas, pero ya las tengo por las rodillas, la mitad de las noches siempre me pasa lo mismo. Me hago uno o dos dedos en cuanto me meto en la cama y me quedo dormida sin subirme las bragas. Bueno, a lo que iba, que luego siempre llego tarde. Agarró el móvil, busco el Instagram de mi nuevo compi de curro...