¿Estás despierto, Juan? II
Continúa la noche...
Juan y Ana se miraban en la penumbra de la noche. El uno frente al otro, de rodillas, sobre la húmeda cama. La habitación quedaba levemente iluminada por la tenue luz de la luna que entraba tímida por la pequeña ventana del cuarto de Juan. El calor era sofocante. Calor provocado por la humedad de la playa en verano y la humedad de dos adolescentes, el uno frente al otro.
-Bien,hermanita.- dijo Juan con voz grave y susurrante, dejando de apretar la pequeña y suave mano de Ana.
Ana le miraba fijam...