Mensaje recibido, allá voy

Dónde estás? ya sé, tras la puerta del cuarto de baño...

-Voy a darme una ducha.- me dices en voz baja, rozándome con tus labios la mejilla sonrosada, sin poder evitar que me sobresalte al verme abstraída, de repente, de mi duermevela.

Sonríes al ver mi sorpresa, tus ojos no se separan de los míos, aún hinchados por el sueño, te acercas a mí. Al principio tus labios sólo rozan los míos, delicadamente, como con miedo a dañarlos de algún modo, pero ese miedo desaparece de inmediato cuando pongo mi mano en tu nuca, por debajo de tu pelo, y te acerco más a mí...

¿Quedamos?...

Si quedamos, tú y yo sabemos lo que pasará...

En cuanto al amor, es como una deliciosa y aparente poción mágica que consuela a ignorantes y débiles. Sí, te hace sentir cálida y transcendente, pero al final el amor te deja débil, dependiente y gorda.

Estaba harta de ir de cama en cama, siendo presa y adicta de caricias insaciadas de piel, de besos curiosos por cada espacio de mi cuerpo, de dedos traviesos deseando entrar en mí, y en mi juego de vida, de mordiscos... casi dolorosos, pero a su vez tan placenteros, que harían temblar al hombre más...

Dulce despertar

Abro los ojos y te encuentro ahí...

Estaba todo oscuro, tardé unas décimas de segundo en darme cuenta que todavía tenía los ojos cerrados. La boca tenía un sabor entre metálico y fresco. Mi cabeza daba vueltas intentando ubicarme, estaba totalmente desorientada...

Intenté abrir los ojos poco a poco, evitando así que el sol que entraba por la ventana justo a mi lado de la cama me hiciera daño. En ese momento, sentí cómo unas manos suaves y a la vez decididas, rozaban mis caderas desnudas y subían hasta abrazarme. Ese gesto hizo que inc...

Yo soy el mar

El poder del mar me atrae con sus olas, la luna me hipnotiza... pero no tanto como tú

La suave brisa rozaba mi cara descubierta, casi quemada por el sol. El sonido de las olas, arrastrándose hasta invadir la intimidad de la orilla, acompañaba mis pensamientos. Ese sonido rítmico, incesante y penetrante era mi mejor compañero en ese estado de evasión. Cómo describir la sensación en ese momento... Paz, tranquilidad, plenitud... Mi mirada se perdía hasta lo más profundo del agua, antes cristalina y ahora oscureciéndose inminente por la puesta de sol. Ese sol amenazante, ardiente, de hace unas h...