Sumisa de corazón (2)
Diana es obediente, aunque a veces, un poco olvidadiza...
SUMISA DE CORAZON (II)
El calor, de nuevo ese calor sofocante. Y solamente eran un poco menos de las nueve de la mañana. Por la ventana entreabierta de la habitación de Diana se filtraba el ruido de algún camión al pasar por la carretera cercana, y la luz del sol iluminaba toda la estancia.
Diana ya estaba despierta desde casi una hora antes. No recordaba sus sueños, aunque el despertar como ella había despertado, boca abajo en su cama, una mano entre sus piernas abiertas y totalmente desnu...