En la Biblioteca
Trabajar de Bibliotecario te permite conocer gente interesante. Como aquella chica que todas las mañanas iba a estudiar...
Su olor quedaba en los libros. Ella se sentaba siempre en la misma mesa, estudiando... O haciendo como que estudiaba.
Entraba siempre a las nueve y veinte de la mañana por la puerta principal de la biblioteca. Siempre llevaba un pañuelo en el pelo, y solía llevar largas faldas hippies y camisetas de asillas. Solía irse directamente a su silla, dejaba libros y blocs sobre la mesa y se paseaba entre las estanterías, buscando distraída algún libro.
Yo la miraba desde mi escritorio de bibliotec...