Enseñar a amar es más difícil de lo que parece V.
Siempre fui la persona que no podía confiar en nadie, nunca tuve una relación seria y siempre estuve bien así hasta que llego alguien que iba a cambiar mi mundo y a poner mi vida de cabeza.
A la mañana siguiente de nuestra maravillosa noche yo me desperté temprano y tuve varios minutos para observar a Natalia mientras dormía. Yo ya sabía que estaba más allá de mi “no-relación”, estaba más que enamorada de ésta niñita que me había robado el corazón. Estaba en una situación en la que nunca me había encontrado. Estaba en mi país de nuevo, tenía un trabajo estable y tenía una relación en la que estaba más que enamorada. También estaba aterrada de todo esto pero más feliz que nunca.
Natalia s...