Un masaje de pies para mi cuñada
Mi cuñada se queda en casa a dormir y ha tenido un día de perros. Yo le ayudo a que se relaje.
Aquella noche mi cuñada se quedaba a dormir en casa. Tras haber pasado el día en casa, se había hecho demasiado tarde como para que llevarla de vuelta a su casa fuera una opción que mereciera la pena contemplar, considerando que en casa había una cama de sobra para ella.
Muy parecida a mi mujer, mi cuñada apenas pasaba los 20 y seguía siendo bastante inmadura en todos los sentidos, pero aún así nos llevábamos bien.
Nos estábamos preparando para ir a dormir, pero yo, que aún andaba lejos de t...