Las andanzas de Wanda (V: El Plan)
Wanda va planeando algo grande, pero mientras tanto...
Desperté con un agradable dolor por todo el cuerpo sólo para descubrir que mi vecinito estaba pegado a mi espalda como Dios lo había traído al mundo y agarrado con una mano a mis pechos mientras roncaba suavemente, y sonriendo me volví hacia él, que no despertó con el movimiento. Me dediqué a mirarlo un instante y después, lentamente, empecé a esparcir pequeños besitos en su pecho delgado, en su estómago y en su ombligo, y al llegar a su sexo, vi que había respondido a mis estímulos y empezaba a tomar...