Autobiografía de una gran mujer (13)

Cuando el chico levantó la vista, se encontró conmigo, que lamiéndome los labios separaba el pareo que llevaba sin nada debajo mostrándole el coño casi depilado. Se le calló lo que llevaba en las manos y mientras, me miraba de arriba a bajo con cara atónita y de un modo casi instintivo, se acomodó la verga bajo el tensado traje de baño.

Capítulo 16: ¡No me provoques!

A Roberto y a mí nos encanta viajar, conocer nuevos lugares nuevas costumbre y especialmente nueva gastronomía. Siempre lo habíamos hecho a nuestro aire y por nuestra cuenta.

Nos reíamos mucho de esos grupos de japoneses que recorren las ciudades siguiendo al guía de turno que encabeza la marcha con un estandarte levantado y no comprendíamos a esas vacaciones que disfrutaban con unas consistentes en pasarse los días tumbados al sol en una playa caribeña.

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Autobiografía de una gran mujer (12)

Me llamaba por teléfono casi cada noche y poco a poco nuestras conversaciones fueron tomando un cariz erótico. Un día, acabamos máturbándonos mientras hablábamos y desde ese momento montamos una línea erótica privada.

Capítulo 15: En la distancia

Por razones profesionales, Roberto tuvo que estar más de un mes fuera de casa.

Me llamaba por teléfono casi cada noche y poco a poco nuestras conversaciones fueron tomando un cariz erótico. Un día, acabamos máturbándonos mientras hablábamos y desde ese momento montamos una línea erótica privada.

Me compré un vibrador, que todavía conservo y que utilizaba hablando con Roberto. Con el aparato funcionando en mi coño, me acariciaba el clítoris y los pezones m...

Autobiografía de una gran mujer (11)

Era realmente guapo, con un pelo rizado (lo que ahora diríamos a lo “David Bisbal”), unas facciones delicadas y un cuerpo que daban ganas de comérselo. Cuando quedó sólo con un diminuto tanga, las chicas comenzaron a levantarse a bailar con él apretando su vientre contra el mal disimulado y enorme bulto de la entrepierna del muchacho.

Capítulo 14: ¡Boy, boy, boy!

Ahora que se acerca la Navidad, ya empiezo a ponerme de mal humor pensando en lo que me espera. Me molestan mucho las convenciones sociales y las celebraciones marcadas por un modo de hacer preestablecido.

Las bodas organizadas como un espectáculo, cuyo único objetivo es sacar dinero a todo el mundo, me desagradan especialmente y si van precedidas de las respectivas despedidas de soltero / a, me resultan insufribles e intento escaparme. Pero a veces no tengo más...

Autobiografía de una gran mujer (10)

Yo jadeaba impaciente, Roberto se abrazó a mi cuerpo, me besó el cuello, me acarició el coño con los dedos que habían explorado mi recto y sentí su glande duro como una piedra presionando para entrar en mí trasero virgen.

Capítulo 13: Home Cinema

No sé ni cuando ni quién empezó; pero adquirimos la costumbre de alquilar películas X y verlas juntos. Nos sentábamos el uno junto al otro, acariciándonos como adolescentes y excitándonos poco a poco con las imágenes.

Mi mano buscaba su polla palpitante y él deslizaba una y otra vez la yema de sus dedos entre los labios de mi coño, tocándonos como adolescentes en celo.

Ante una buena escena de felación, me lanzaba sobre su miembro imitando lo que sucedía en la...

Autobiografía de una gran mujer (09)

Me abrazó fuertemente y su boca se fundió con la mía en un beso salvaje y lleno de deseo. Nuestras lenguas se cruzaron, como hacía mucho que lo hacían y sentí el roce de su verga en mi vientre. Me agache y tome su polla en mi boca como sabía que le gustaba, el glande encajado entre mis labios y la punta de la lengua jugueteando con él. Una ligera presión de sus caderas y se deslizó suavemente entre la lengua y el paladar. Yo permanecía quieta, él puso sus manos sobre mi cabeza y empezó a moverse como si me follara.

Capítulo 11: De novios a matrimonio

Fue un noviazgo largo de casi seis años, mi madre movió sus influencias y me buscó un puesto en la facultad para que hiciera en doctorado. No cobraba un duro y yo de lo que tenía ganas era de irme a vivir con Roberto; así que convencí a mi padre de que me buscara un trabajo con alguno de sus amigos y deje la facultad para disgusto de mi madre que veía en mi a la continuadora de su saga universitaria.

Yo ya pasaba más noches en casa de "Los tres caballeros...

Autobiografía de una gran mujer (08)

Sentados en corro, empezamos a hablar y a beber bromeando sobre nuestro futuro. Alguien sacó “maría” y empezó a liar unos canutos. El ambiente fue aumentando de temperatura, real y mentalmente, y entre risas fuimos despojándonos de la ropa hasta quedar totalmente desnudos.

Capítulo 10: Piso para tres

El noviazgo con Roberto me costó repetir un curso. Nunca había tenido problemas con los estudios, sabía distribuirme bien el tiempo y me daba tiempo para estudiar y divertirme; pero Roberto me absorbió demasiado tiempo y lo acabé pagando.

Roberto acabó la carrera y no le constó nada encontrar trabajo. Era de fuera de Barcelona y mientras estudiaba había vivido en una residencia de estudiantes; ahora necesitaba un piso que pudiera pagar con su exiguo sueldo.

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Autobiografía de una gran mujer (06)

Ha sido uno de los hombres con más aguante que he conocido, era capaz de llevarte al orgasmo varias veces seguidas sin correrse y cuando lo hacía tenía las eyaculaciones más abundantes que he visto.

Capítulo 8. Una mente organizada

Como todas las mañanas del curso escolar, estaba esperando el autobús de la línea 7 en la primera parada de la Rambla de Cataluña. No recuerdo la razón, pero aquel día iba más cargada de libros que de costumbre y el autobús tardó más de lo habitual y como consecuencia, llegó lleno a rebosar y no pude sentarme.

Tras dar un par de bandazos, un chico me cedió su asiento. No estaba acostumbrada a esas galanterías y probablemente en otras circunstancias las hubi...

Autobiografía de una gran mujer (07)

Me gusto su físico desde el primer momento: algo más alto que yo, hombros anchos, torso fornido sin exageraciones de masa muscular, ojos claros y pelo largo castaño recogido en una coleta. No sé porque, los hombres con coleta me han excitado siempre mucho.

Capítulo 9: Excursión a la nieve

Un día Alex vino a verme con una cara que me indicaba que buscaba algo de mí. Nos conocíamos lo suficiente para poder ocultarnos nada el uno al otro.

En efecto, venía a hacerme una propuesta. Él y un amigo estaban organizando una salida a la nieve. Disponían de dos coches y pretendían reunir a cuatro chicos y cuatro chicas. Ellos se encargaban de buscar a los "elementos masculinos" que faltaban y yo debía buscar tres amigas dispuestas a "pasarlo bien" (daba...

Autobiografía de una gran mujer (05)

aquel piso se convirtió en nuestro sitio de reunión habitual y fue el detonante para que se iniciara una temporada de tórridas fiestas con poca luz, mucho alcohol, algunos porros y todo el sexo que podíamos; y que dejaban tras de sí un rastro de vasos sucios, ceniceros llenos, condones usados y olor a semen.

Capítulo 7: La cabaña del árbol

La cabaña de madera en la copa de un árbol es un elemento típico de las películas norteamericanas de adolescentes, por el que yo personalmente siempre he sentido una atracción especial.

Mi grupo de amigos también tuvo su "cabaña del árbol". El abuelo de uno de mis amigos enfermó y la pareja de ancianos se fue a vivir con su hija, dejando su piso libre. A mi amigo se le ocurrió la idea de pedir a sus padres que le dejaran el piso vacío para estudiar, ya que co...

Autobiografía de una gran mujer (04)

La primera vivencia de relación entre sexo y automóvil me sucedió una noche de fin de semana a la salida de un cine, al que habíamos ido un grupo de amigos y conocidos.

Capítulo 6: Anécdotas de coches y otras situaciones.

La primera vivencia de relación entre sexo y automóvil me sucedió una noche de fin de semana a la salida de un cine, al que habíamos ido un grupo de amigos y conocidos. La mayoría decidió continuar la velada en un bar musical. Yo tenía un examen que preparar, una pareja tenía ganas de "otra cosa" y un chico que apenas conocía se ofreció a llevarnos a casa.

La pareja se acomodó en los asientos traseros y yo me senté junto al conductor. Ape...