Romance Prohibido 5

Su mano se deslizaría luego hasta mi entrepierna, hacia mi vagina, y yo la dejaría entrar para que sus dedos me masturbarán con habilidad. ¡Qué caliente que estaba!

― ¿Adónde vamos? –le pregunté.

― A tu dormitorio.

― ¿Y qué vamos a hacer en mi dormitorio?

― Vamos a cambiarnos de ropa.

― ¿Para qué?

― Para seducir a Paola, por supuesto.

Entramos al dormitorio y Sonia fue directa al armario.

― ¿Qué buscas?

― Esto –me dijo. Estaba sosteniendo entre sus manos un bikini rojo.

― Este es para ti. ¿Tienes otro para mí?

― Sí, tengo pero…

― Perfecto. ¿Dónde está? La ayudé a encontrarlo. El otro bikini que tenía era...

Romance Prohibido 4

― No seas tonta, Raquel. Tienes un cuerpo increíble. Además tienes algo que le encanta a las jovencitas: tienes experiencia.

Estaba frente al espejo de mi dormitorio cuando escuché el timbre de la puerta. Paola había llegado más temprano de lo que esperaba para otro día de trabajo agotador.

Me miré en el espejo por última vez antes de bajar a atenderla. Hoy había decidido vestirme algo mejor que ayer: unos pantalones de yoga y una camiseta sin mangas, con un pequeño escote para que Paola pudiera apreciar mis pechos.

Era una tontería, pero no pude evitar vestirme así para que me viera. Sabía que no iba a pasar nada ent...

Romance Prohibido 2

Ahora que estaba cerca de ella, pude ver como su camiseta estaba llena de sudor y sus magníficos pechos brillando húmedos.

Estaba tomando un café en la cocina, tratando de leer un libro, pero no podía evitar echar un vistazo cada tanto hacia el jardín.

Quería confirmar que Paola estuviese haciendo todo lo que le había indicando y pude ver como seguía trabajando sin cesar.

Aunque tenía también que admitir que había otra razón por la que la estaba espiando de la cual me avergonzaba un poco. Paola era una joven muy atractiva. Tenía una hermosa sonrisa y un cuerpo perfecto.

Sus senos trataban de escapar de los con...

Romance Prohibido

Luego de ver como su marido la había engañado con su joven secretaria, Raquel pensó que a sus 38 años la vida se le había acabado. Pero eso fue antes de conocer a Paola, una chica atractiva de solo 20 años, quien le hará pensar a Raquel que quizá su vida recién está comenzando.

Abrí la puerta de mi casa y me encontré con una mujer joven y de figura bien torneada. Vestida con jeans y una camiseta sin mangas.

Le di una mirada furtiva a su pronunciado escote antes de saludarla.

― Tú debes ser Paola –le dije.

― Si, así es. Y tú eres Raquel.

Paola me mostró sus dientes blancos al sonreír y se me acercó para abrazarme.

Era más alta que yo, y mucho más fuerte, tal como pude percibir al sentir como sus brazos me apretaban en la espalda. Mejor así. Era la clas...

Romance Prohibido 3

No podía creer lo que le había dicho. No fui yo quien dijo eso sino mi cuerpo. Mi cuerpo que estaba caliente al imaginármela desnuda, y que no pudo evitar hacerle esa sugerencia inapropiada.

Faltaba poco para que cayera el sol y se acabase el día cuando Paola entró a la cocina. Su camiseta blanca estaba no solo llena de sudor sino también de barro, como así los jeans que estaba usando.

― Estás toda sucia –le dije.

― Es complicado el trabajo de jardinera –dijo riéndose.

― No puedes volver así a tu casa.

― No estoy tan mal... ¿o sí?

― Si, créeme, estas muy mal. ― Me puedo asear un poco en el lavabo.

― No, no me parece. Tienes quedarte una ducha.

No podía...