L 34

Cese de L. Colocación del rabo.Final.

34 Cese de L en la empresa. Colocación del rabo. Nuevo destino. Final

El día siguiente aportaría más novedades a la nueva marrana. Al levantarse fue a ver la marca, como hiciera la noche anterior, aún la molestaba pero bastante menos. Seguía igual, parecía que así iba a permanecer siempre, con el mismo tono en el color, sin la pérdida de tonalidad del dibujo. Vuelve a sentirse plenamente marrana.

Por su mente pasa la idea, tantas veces acariciada, de dejar aquel lugar, entonces siente como si...

L 33

L marcada

33  L  Marcada

El presidente de MCM al contemplar las nuevas fotos de L, donde aparece con las marcas perfectamente visibles, reconoce la similitud con la que llevan las pupilas de un club muy particular y exclusivo, y teme por lo que puede estar sucediendo con la chica, con las consecuencias que puede traer para su empresa si la mantiene como modelo de la comida de gatos. Le queda la duda de que las marcas no sean las mismas que lucen las pupilas del club, pero todo le lleva a esa idea.

Quie...

L 32

L es castigada en el club

32. Castigo por incumplimientos.

Cuando J comunicó al director del Club que L iba a recibir la llamada del fotógrafo para realizar otra sesión de fotos, el director informaría a J del castigo pendiente, queriendo conocer las intenciones de este sobre las marcas que debería lucir la marrana.

.- La marrana tiene pendiente un castigo que puede recibir antes o después de hacer las fotos. – Aunque J supuso la clase de castigo de la que estaba hablando el director no pudo contenerse de preguntar, y...

L 31

L regresa al club. Realización de la segunda prueba fotográfica

31 Regreso al club. Segunda sesión fotográfica

L regresaba de una fiesta que se había convertido en un infierno para ella. Un hombre de la granja había aparecido a dar de comer a los cerdos y la había encontrado y sacado de la pocilga, llevándola a una casa de la granja, acabando con su martirio y alejándola de Pol. No sabía que había sucedido con este ni las consecuencias de lo ocurrido, si es que las hubo.  Ella solo quería irse. Tuvo que convencer al hombre de que no llamara a la policía. La dej...

L 30

Fiesta en el campo VIII

30 Fiesta en el campo VIII

Cuando Cata se fue, las dos chicas quedaron aún más asustadas, podía contar lo que estaban haciendo. La criada, muy probablemente, habría escuchado el comentario de Pol y el de Cata y, sería difícil que no hablara con alguna de sus compañeras de ello, y de lo que parecía que estaba sucediendo en el dormitorio, y Cata podía hacer lo mismo con los invitados. Hubiera sido mucho mejor que no se hubiera ido, aunque hubiera supuesto seguir contemplando lo que los chicos hacían...

L 29

Fiesta en el campo VII

29 Fiesta en el campo VII

Berta había presenciado todo lo ocurrido, cada vez más turbada, viendo como su amiga era humillada por una petición de perdón, que si era  difícil de realizar, también lo era de presenciar por todo lo que tenía de vejatorio para Tracy, y al tiempo, por todo lo que tenía de excitante para ella. Berta estaba nerviosa viendo a la joven balbuceando un intento de escusa, que de nada serviría, para evitar la exigencia del chico de que se arrodillara y pidiera perdón debidamente....

L 28

Fiesta en el campo VI

28 Fiesta en el campo VI

Tracy estaba presenciando el baile de su amiga completamente abochornada, a la par que aturdida y amedrentada. No era capaz de comprender cómo L podía ofrecer un espectáculo que solo podía calificarse de obsceno, y hacerlo ante esas chicas y ella misma, mostrando, inclinada para mejor descubrirlo, el agujero del culo, que abría separando las nalgas, para después meter los dedos en él, en un gesto licencioso, desvergonzado, mientras caía entre los muslos el cencerro con su p...

L 27

Fiesta en el campo V

27 Fiesta en el campo V

Llegar a casa de su amiga, ir vistiendo de la forma en que iba, suponía otro trauma a pasar por L. Ese fin de semana tan deseado, se estaba convirtiendo en el peor de su vida. Y quedaba la llegada de Martin. Solo por eso quería, tenía, que escapar de allí. No podía verle, no podía verla. Pero estaba condicionada, temía a Pol y a la señorita, éste por lo que pudiera hacer delante de todos sus amigos y a la señorita porque sabía que no dejaría impune una acción tan contraria a...

L 26

Fiesta en el campo IV

26 Fiesta en el campo IV

Por fin llegaron al guardarropa, L podría recuperar su chaquetilla, aunque eso supusiera bien poco en cuanto a poder adecentarse, pero ni eso conseguiría, aunque lo que más ansiaba era desaparecer de aquel lugar. Al preguntar por la chaqueta, la chica explicó que se la habían llevado unos señores, diciendo que se la entregarían a ella. Temieron que se la dejara olvidada. Era falso. Tim la había recogido y guardado en el coche.

.- Alguien dijo que hoy te apetecía estar...

L 25

Fiesta en el campo III

25 Fiesta en el campo. III

Cuando L salió del círculo de luz, lo hacía vencida, humillada, sin fuerzas para enfrentarse a lo que esperaba ocurriría, su última humillación. Al recuperar la visión de lo que sucedía en la habitación, casi ríe de alegría nerviosa, de alborozo perplejo. Una de las chicas estaba arrodillada en el suelo con la verga de su acompañante en la boca, otra, sentada sobre su compañero, recibía las caricias de éste en las tetas y con la otra mano debajo de las faldas. La tercera...