Un día normal

Una joven se prepara para su día de trabajo. Todos los acontecimientos van poniéndola cada vez más deseosa y caliente. Y por la noche su vecino le dará el colofón.

La noche era preciosa aunque calurosa. Me levanté de la sala, fui a la nevera y me llevé un vaso de jugo de naranja frío a la recámara. Aquella mañana me levanté con más pesadez que con ganas. El calor era insoportable y no supe qué ponerme. Tomé mi toalla y me dirigí a la regadera. Aunque es la mejor forma de dormir cómoda, mis bóxer blancos ajustados dejaban ver el sudor de una noche cálida. Mi top húmedo transparentaba la redondez de mis senos y el pardo de mis pezones. El sudor de mis rostro, trazaba un...