Fotos Privadas
Alguien nos propone un juego bastante morboso.
Hace ya algunos años que compramos nuestra primera cámara digital y desde entonces hemos hecho una infinidad de fotos; con la familia, con amigos, de viaje. A mí me gusta la fotografía así que procuraba inmortalizar cada paisaje y cada atardecer. Con la novedad de no tener que llevar a revelar el carrete empezamos a hacer fotografías eróticas y descubrí que Val disfrutaba. Sabía, (y sabe), seducir a la cámara y las sesiones de fotos eran de lo más excitante. Sólo necesitaba darle un par de instruccion...