Mis experiencias con la masturbación anal (IV)

Sobre lo que pasó un año después de haber metido por mi culo tres de mis dedos

Empecé a estudiar en la mañana y mi padre se fue, cosa que nos afectó muchísimo a mi madre y a mí, pero la vida de nosotras seguía y había muchas cosas por meter en mi culo hambriento. Debido a la ausencia de mi padre, mamá casi nunca estaba en casa porque debía hacer muchas diligencias, papeleo, seguro médico, divorcio, etc. Pasé un año haciendo lo mismo, es decir, metiéndome tres dedos hasta gemir de lascivia. Un año puede parecer mucho tiempo haciendo lo mismo sin transgredir los límites, sin embargo, el...

Mis experiencias con la masturbación anal (III)

Sé que son relatos cortos. Lo hago así porque son muchas experiencias y la cuarentena me permite, casi me obliga a joderme el ano y escribir a diario, por lo que, mientras la plataforma me lo permmita, habrá un relato nuevo cada día.

Luego de hallar tan hermoso video tutorial puse en práctica lo que decían las guías. Mi madre guardaba un recipiente inmenso de vaselina que usaba para hidratar sus labios y no he querido pensar si la usaba para algo más. Lo encontré sin trabajo, en mi habitación, me metí bajo mi edredón, me puse de lado como la chica del video, levanté mi falda, bajé mis bragas, saqué un poco de vaselina con mis dedos y empecé a masajear mi ano suavemente con la respiración a millón por hora, el cuerpo sudoroso de calor po...

Mis experiencias con la masturbación anal (II)

Segundo relato de mi serie. En este cuento cómo la curiosidad y el morbo me llevaron ir un poco más allá de solo tocar la piel de mi ano.

Pasaron unos 5 años durante los cuales aprendí a conocer un poco más mi cuerpo, me interesé por la educación sexual en la escuela y comprendí muchas cosas acerca de la imagen que pude observar en la televisión aquella noche mientras mamá iba por café. No sobra decir que aprendí mucho sobre erotismo buscando videos en la web en distintos cafés internet cerca del barrio en donde vivía y acariciando mi vagina, acariciando mis pequeñísimos senos, incluso empecé a sentir una atracción mayor por los chicos, aquel...

Mis experiencias con la masturbación anal (I)

Una serie de relatos en los que cuento cómo empecé a jugar con mi ano, por qué y cómo lo he venido haciendo todos estos años.

Todo empezó siendo muy niña. Tengo 26 años y en este momento tengo un buttplug metido en el culo, me encuentro sentada en una silla y me gusta mover mi cola a un lado y al otro para sentirlo moverse dentro de mí. Solo hace falta un poquito de osadía para descubrir uno de los placeres más deliciosos que puedes encontrar en tu cuerpo.

Me hallaba en la habitación de mi madre viendo televisión con ella. Estudiaba en la tarde, así que solía desvelarme un poco con ella en su habitación. Eran las 11 y 3...