Mi ducha me da el poder
La ducha tanto de Fina como de su amiga Alicia se habían estropeado, y la residencia les dijo que iba a tardar unos días más en arreglarla. Fina me pidió a mi si le dejaba ducharse en la mía, lo que no sabía es que eso me daría poder total sobre ella. Poder que después también tendría ella sobre mi.
Hola, soy Juan de nuevo. Por aquel entonces tenía 20 años y era mi tercer año de periodismo. Seguía en la residencia y así conocía a muchas más novatas nuevas y ese año puse el ojo en Fina. Fina medía 1,75cm, muy definida ya que jugaba al balonmano profesionalmente, un culazo increíble en su sitio gracias al deporte, pocas tetas, un abdomen marcado, morena de pelo rizo y ojos azules. Su cara a veces parecía la de una leona, y eso me ponía más.
Fina al tener que ir a entrenar al balonmano todos los día...