Pague 2 y llévese 3
Todos los hechos y personajes de estos relatos eróticos (incluida yo misma) son ficticios, cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia ¿O quizá no?
- ¡Me faltan ingredientes! Pensó Daniela mientras abría la nevera y confirmaba su presentimiento. Eran las cinco y diez de la tarde y acababa de quedar con Damián a las nueve para cenar en casa. Damián era un tipo peculiar, un amigo "con derecho a roce" desde hacía años, delgado, pelo largo, barba de dos días... con un look desaliñado y bohemio como la mayoría de los músicos.
Damián era un genio con la guitarra española, su música transportaba a Dani a un oasis de sensaciones donde cada acorde se...