¿Y porque no? En un paraíso parte 1
Nuestros amigos Hannah y Christian nos han invitado mi marido y yo a pasar un fin de semana en una isla paradisiaca
Con la tibieza de la noche encima cruzamos un césped perfectamente alineado. Seguimos andando por un caminito de cerámica de mármol, hasta llegar delante de un lugar extraño. Parece un trozo de jungla salvaje, de maleza y lianas. Todo el mobiliario es de madera, tallado a mano, la decoración es obra de un gran arquitecto, es asombroso. Decidimos sentarnos para investigar con la mirada y tomar la temperatura ambiental (Jeje). Enseguida un camarero de traje blanco nos trae una carta compuesta por los alc...