Encuentro memorable

Froylán me invitó a divertirme a su fiesta y eso fue lo que hice.

E N C U E N T R O M E M O R A B L E

La amistad entre Froylán y yo arranca desde la infancia, fuimos a la misma escuela hasta concluir la preparatoria; de allí él ingresó a la facultad de economía y yo a la de ingeniería; después cada quién tomó rumbos distintos, sin embargo seguimos reuniéndonos esporádicamente para mantener vivo el laso amistoso. En esta ocasión me envió con un mensajero una invitación para un convivio; no precisó el motivo, simplemente anotó el domicilio, señalándome que estuv...

Hombre de palabra

Silvia quería disfrutar sin perder su virginidad y hay que ver lo que sucedió para conseguirlo.

H O M B R E D E P A L A B R A

Sucedió sin proponérmelo, casi por accidente, como ocurre todo lo que le da sentido a la existencia y al vivirlo hace que esta sea más interesante. A Silvia la conocí en una exposición y venta de equipos de cómputo a la que cada uno representaba a distintos distribuidores. Así lo manifestaba el gafete que portaba al pecho en donde aparecía sonriente en una fotografía y su nombre al pie de ésta; debo confesar que la foto no le favorecía en absoluto pues era más hermo...

Aquellas vacaciones

Como premio por mis buenas calificaciones, fui a casa de tía Gina a pasar las vaciones más hermosas que he tenido en la vida.

A Q U E L L A S V A C A C I O N E S

Cuando concluí el cuarto año de primaria, como premio por las buenas calificaciones que había obtenido, mis padres me mandaron a pasar las vacaciones a Mazatlán, en casa de tía Gina, hermana menor de mi madre, quien a pesar de llevar diez años de casada con el tío Ramón no tenía hijos. Tía Gina era hermosa, de tez apiñonada, pelo lacio y largo, bonita sonrisa y unos ojos claros maravillosos. Era una mujer muy activa y por eso se mantenía en buena forma. Tenía...