Un paseo en coche
Al cabo de un rato el conductor me cogió la mano y .....
Estaba siendo una noche genial, había conocido a un hombre maravilloso y dulce, o eso creía yo.
A eso de las dos de la madrugada decidimos irnos el, yo, sus dos amigos y dos chicas mas. Los seis montamos en el coche íbamos apretados pero lo estábamos pasando tan bien que no importó. Al poco rato de arrancar el coche las chicas ya tenían las faldas por la cintura y continuaban bebiendo. La cosa se complicaba por momentos, yo fingía que bebía. No me importaba demasiado besar a aquellos hombres, pero si...