Cumpliendo 50 años, mis memorias sexuales 03.

Mis memorias. Mis vivencias.

Despierto, al igual que durante los últimos dos años, abrazado a Blanca. Jamás había dormido abrazado a nadie, igual que no soporto el roce de un pijama para dormir, tampoco me gusta descansar sintiendo otro cuerpo. Con Blanca es diferente, lo necesito, lo necesitamos.

Son apenas las siete de la mañana cuando mis labios buscan su piel cálida y sus ojos amanecen entre las rejas de su melena azabache, sonriéndome con sus ojos y respondiendo a mis besos. Nuestras bocas se buscan desesperadamente y nuestr...

Memorias de mis 50 años (1)

Mis memorias, mis vivencias.

CUMPLIENDO 50 AÑOS, MIS MEMORIAS SEXUALES 01.

Vivo solo desde que me divorcié hace seis años. Vivo en un chalet a las afueras de Barcelona y mi ex mujer en otro a escasos tres kilómetros de mí. Mi ex mujer y yo nos llevamos divinamente bien, guardamos un gran cariño mutuo, pero descubrimos que, al irse la chispa del amor, lo mejor era que cada uno hiciera su vida; aunque he de reseñar que continuamos asistiendo juntos a cenas, encuentros, comidas y otras reuniones familiares. Nuestros hijos alternan u...

Memorias de mis 50 años (2)

Mis memorias, mis vivencias

CUMPLIENDO 50 AÑOS, MIS MEMORIAS SEXUALES 02.

Durante todo ese verano de mis 13 años, Reme y yo aprovechábamos cualquier situación para estar juntos y ocultos de cualquier inspección de los mayores o de su amiga Marta. A ésta se le complicó la lesión en el tobillo y al verse postrada, consiguió que su madre contratara a Reme para que estuviera con ella en el cortijo y la ayudara en todo, hasta recuperarse.

Esta situación sirvió para mantenernos cerca, ya que la familia iba al pueblo en escasas o...

Marisa (7 Final)

Final, o al menos eso espero.

Eso espero, por lo menos, que este sea el final del caso Marisa.

El verano de 2009 estaba llegando a su fin y no me podía quejar en absoluto. En el trabajo habíamos conseguido una situación extraordinaria para los tiempos que corren, y en lo sexual tampoco podía quejarme, había "toreado" exitosamente en varias "plazas" y me sentía muy satisfecho de mi mismo. Recientemente hice público mi correo electrónico, el del sobrenombre y he recibido varios relatos con el ruego de novelarlos para poder se...

Marisa (6)

Las cosas se complican.

Carrie se había tomado muy en serio ese fin de semana y aprovechamos cualquier momento para subir a nuestra habitación y follar como dos adolescentes, con desenfreno y pasión… cosa que provocó risas en Emilio, que no cesaba en lanzarnos indirectas. Sin embargo, Marisa con la excusa de la menstruación pasó muchas horas en la cama, decía que no se encontraba bien y así concluyó el domingo, ellos regresaron a Barcelona en la furgoneta y yo, al ir en mi moto, demoré por unas horas mi partida.

Mi muj...

Marisa (5)

No se acaba, continúa la locura.

Ni el martes ni el miércoles vi a Marisa, o supe algo de ella. El jueves a media mañana llegó Emilio al despacho y nos dimos un fuerte abrazo ¡Qué raro era todo! No tenía ningún tipo de remordimiento y me acordé de aquella frase "LA JODIENDA NO TIENE ENMIENDA, NO ALIMENTA PERO CALIENTA".

Emilio y yo tenemos despachos independientes con dos salas comunes, una de ellas para cuestiones laborales y otra como salita, comedor y área de descanso. Con los papeles en la mesa de la sala común, los benefi...

Marisa (4)

¿Cuándo acabará esto?

La entrada a Barcelona resultó fácil por la ausencia de coches a esa hora, por suerte el Barça jugaba fuera y a nosotros nos pareció estupendo. Una de las gemelas de Marisa empezó a llorar desconsolada y Samira, la asistenta marroquí hizo lo que pudo para calmarla. Llegando a casa de Emilio y Marisa, aparqué bien la furgoneta y ayudé a subir algunas cosas al piso y por supuesto a los niños que me adoraban. Tal y como dije en la entrega anterior, una vez llegas con éxito a la segunda infidelidad, todo...

Marisa (3)

¿Poner fin o continuar? Es una difícil decisión.

La mañana del sábado resultó apacible, imagino que cuando has engañado a tu esposa (y amiga en el caso de Marisa) un par de veces, te acostumbras a todo y pierdes por completo el miedo a que se descubra la situación. Me levanté relativamente temprano y nadé un buen rato, al cabo de uno minutos Carrie y Marisa estaban conmigo en el agua, mientras las chicas de servicio se encargaban del desayuno y de los niños. Mis suegros madrugaban para caminar durante dos o tres horas cada día.

A pesar de todo...

Marisa (2)

Las infidelidades hacia mi amigo, deben finalizar. Es lo mejor ¿No?

Durante los siguientes dos días me sentí mal, anímicamente aunque a la vez excitado por la idea de poseer nuevamente a Marisa. Quería llamarla por teléfono, pero no acababa de decidirme en ningún momento, temía su reacción o tal vez que regresaran los remordimientos por haber traicionado a Emilio y a mi mujer Carrie.

Carrie y no nos telefoneábamos cada día para hablar de nosotros y de los niños, sus padres estaban muy a gusto en nuestra residencia, disfrutando de la comida española que Carrie ta...

Marisa (1)

Los valores y la fidelidad entre amigos, se pierden a causa de una mujer, la suya.

Éramos amigos desde los ocho años. Emilio y yo habíamos compartido todos los sinsabores y éxitos de una amistad larga, leal, íntima y especialmente sólida. Pasamos juntos por las diversas etapas de la vida, llegamos a viajar por toda Europa con nuestras motocicletas y ninguno de nuestros dos noviazgos fracasados, consiguió derruir la muralla de nuestra amistad.

Habíamos tenido novias y ligues ocasionales, sin habernos separado nunca. Yo resultaba mucho más lanzado, aunque menos atractivo, pero c...