Solidaridad en Filipinas
Pocas cosas causan tanto placer como conocer países nuevos y ayudar a quienes más lo necesitan.
En serio, pocas cosas me causan más satisfacción que ayudar a quien más lo necesita. Pero si siendo solidario puedes conseguir que el placer sea algo más que una metáfora, digo yo que no hay nada de malo en darle un poco de gusto al cuerpo mientras ayudas al prójimo, o más bien a la "prójima".
Descubrí esta maravillosa iniciativa por un amigo y decidí que yo no iba a ser menos solidario y quería apadrinar también. Por apenas un euro al día, Mary iba a tener la oportunidad de estudiar una carrera...