Cambiando de aires
- Bien, esclava, ahora que eres oficialmente mía vamos a limpiarte adecuadamente para empezar Y tras propinarme un azote que casi me tira totalmente al suelo me quitó el buttplug sin miramientos y me hizo seguirla.
Había tenido un viaje a Madrid placido; al fin conseguí probar el Ave, un tren rápido y seguro que en menos de dos horas me dejaba en la estación de Atocha.
Durante unas horas me dedique a pasear por mis rincones favoritos de la gran ciudad, pero al fin me decidí a parar en una pequeña cafetería, Ribes se llamaba.
Días antes y a través de una de las múltiples redes sociales había quedado con una persona especial para ese día. En pleno centro de Madrid, puerta de sol estaría abarrotada.
Me...