El Cobertizo

El conductor a toda prisa y el lider dirigiendo. Los otros dos conmigo detrás. Un pequeño cobertizo era lo único que había

La noche no era especialemente fría a pesar de ser finales de marzo y la brisa del mar soplaba constante hacia la ciudad. Había luna llena y la terraza de la sala de fiestas estaba iluminada ténuemente por su luz. Yo estaba apoyada en la barandilla mirando hacia el pequeño puerto deportivo. Había bebido más de la cuenta y decidí tomar un poco el aire.

La celebración de la despedida de soltera de mi hermana estaba siendo todo un éxito. En pocos días se casaría con Roberto, un chico no mal parecido y co...