Rompiendo una mala racha
Salí de fiesta, y me econtré una vieja "amiga" que no iba sola
¡Al fin! Terminé el último examen del semestre, un viernes a las siete de la tarde. Derecho Romano... terrorífico!
Pero era libre, casi tres semanas encerrado, poniendo codos, y con ganas de sacarme esta maldita carrera de una vez!
A la espera de las notas, se preveía un segundo trimestre tan o mas duro que este, por lo que tenía que aprovechar los días antes de volver de nuevo al suplicio.
Me fui a casa, una ducha rápida, me puse mis mejores galas, y directo al bar. Mis amigos ya estaban...