Hecha mujer. Una experiencia que me hará cambiar

Con mis transformaciones me quedaba insatisfecha, quería sentirme más mujer, y llegué a donde nunca pensé que podría llegar.

Ya llevaba mucho tiempo vistiéndome, fantaseando, probando el cibersexo con hombres. Sentía que había llegado la etapa de mi vida ideal para experimentar como una verdadera mujer, con todo lo que sentía  dentro. Antes no estaba preparada; esperar más traería más conflictos, más dificultades. Si al final quisiera llevar esta vida para siempre no podía esperar más para empezarla.

Creo que soy travesti de toda mi vida, desde niña aprovechaba la ocasión de estar sola en casa para ponerme cualquier prenda...

Camarera en un club de variedades

Un chico joven al que le gusta travestirse vive un verano genial trabajando como camarera en un club de variedades y conociendo los placeres de ser mujer.

No sé cuando empezó mi tendencia hacia lo femenino. Lo recuerdo desde bien pequeña, cuando me dejaban sola en casa y no se me ocurría otra cosa que ponerme la ropa de mi madre o mi hermana y pasearme por casa. Me sentía genial.

Fui creciendo y fui obteniendo placer sexual de mis transformaciones a la vez que necesidad por verme cada vez mejor, siempre me parecía poco y quería mejorar y mejorar. Habían llegado mis años de la universidad, el vivir fuera y ganar libertad. Pero compartía piso, tenía poco...