El enemigo (parte 4)

Rafael continúa poco a poco despedazando a Pedro. Palabras clave: dominación, serie, humillación.

NdA: publiqué por error la versión no definitiva de este relato. Me disculpo con aquellos que lo hayan leído ya, pero no me gustaba tenerlo ahí sin sentirme yo satisfecho, por lo que procedí a eliminarlo y subir la que debió haber sido desde un principio.

“Dime dónde vives que quiero ir a verte”

Hacía diez minutos que el mensaje había iluminado el móvil de Pedro. Lo recibió cenando en su casa, con la televisión de fondo y en un primer plano sus cavilaciones sobre los acontecimientos de los últ...

El enemigo (Parte 3)

Inesperada continuación en la que Pedro vive el día después de haberse visto descubierto por el hermano menor de su abusador y uno de sus peores alumnos. Palabras clave: dominación, serie.

NdA: *Las partes 1 y 2 de este relato fueron escritas como una historia completa; aunque el final quedara como algo abierto, no era mi intención proseguirla. Esta tercera sale de la motivación que he recibido gracias a los mensajes que me habéis mandado, pero como ha sido escrita muy a posteriori y mi inspiración ha sido otra, es normal que haya algunas incoherencias de continuidad. Sirva de ejemplo que los otros fueron escritos como si los protagonistas estuvieran en una noche de verano, mientras que en e...

Unas cabinas vacías

En su primera visita a las cabinas Samuel no contemplaba tener tanto éxito. Palabras clave. glory hole, mamadas, dominación.

-        Buenas tardes

El hombre del mostrador saludó mecánicamente sin dejar de organizar sobre el mostrador el contenido de una caja de SEUR. Samuel correspondió con una rápida inclinación de cabeza y se internó, indeciso, en el local.

Reconoció de un vistazo las escaleras al piso superior en una de las esquinas al fondo, pero evitó encaminarse hacia ellas directamente y optó por ir a la estantería que exponía los dildos. Fue observando los distintos modelos ordenados por forma y tamaño, cogie...

Lluvia de verano

Un encuentro morboso en el parque en una noche de bochorno. Palabras clave: lluvia dorada, cruising, mamada

Samuel llevaba toda la tarde metido en el coche con la nariz hundida en Grindr, esperando a ver si se concretaba algún plan para esa noche en el parque. A pesar de que aquel lugar no era conocido por ser un punto de encuentro para practicar cruising, ello no significaba que no reuniera las condiciones idóneas para planteárselo.

El Castro era una colina poblada de árboles que había logrado resistir los embates de las excavadoras y se mantenía como una isla verde en el centro de la ciudad. El bosqu...

El pasado golpea con fuerza 3

Acabar obligados a trabajar juntos era algo que ni Jaime ni Roberto esperaban. ¿La aparición de un nuevo actor en escena servirá para desatascar la situación? Palabras clave: serie, mamada, primera vez.

La última corrección de la profesora se había precipitado como una piedra sobre un jarrón de cristal. Jaime cerró los ojos, respiró profundamente y se giró hacia Roberto quien se encontraba todavía de pie; con la postura de una piedad indignada le informó silente de que aquello también le resultaba igual de engorroso, pero que no parecía haber más opción que acatar y seguir adelante. Él lo miró con dureza un instante, desvió sus ojos hacia arriba y se sentó de nuevo mientras mordía su lengua con el canino i...

El pasado golpea con fuerza 2

Después de la sesión de sexo interrumpida, parece que el misterioso HetDiscrt podría ser alguien conocido. ¿Qué ocurrirá en aquel descampado? Palabras clave: masturbación, serie.

Bajo el efecto de la luna, las hierbas eran púas de plata meciéndose con la suave brisa. En aquel ambiente irreal, los movimientos mecánicos de la pareja teniendo sexo contra el muro les hacían parecer autómatas de hojalata a los que les hubieran dado cuerda profusamente.  El golpeteo se repetía monótono y saciaba de sonido el ambiente vacío. Roberto estaba lívido.

Se mantuvo agachado, casi completamente estático salvo por su boca, que se había abierto con incredulidad para cerrarse nuevamente sin que...

El pasado golpea con fuerza

El sexo puede ser una buena forma de recordar. Palabras clave: cruising, serie.

-        T va discret?

-        Sí. ¿qué quieres hacer?

-        M la chups y te follo. Sin caras.

-        ¿No pasas foto?

-        No, soy my discrt.

-        ¿De cuerpo al menos? Guay, este soy yo.

-        Me va. ¿Qdamos entncs?

-        Vale, en el callejón debajo de mi casa, donde te dije.

-        Manda ubicación. Ok, llego en diez minutos.

-        Ok

Jaime dejó el teléfono sobre el escritorio e hizo girar su silla, deteniendo su mirada en...

Tras la cortina de lluvia

Cuando las presas cambian sus rutinas seguras corren el riesgo de que los depredadores estén acechando. Palabras clave: violación, lluvia dorada, mamada.

Jaime iba de regreso a casa después de una jornada maratoniana. La suerte no le había acompañado aquel día en el jefe de estudios había decidido entrar a los cuartos de baños del tercer piso mientras él se encontraba en la repisa de los lavabos, sentado, fumando un cigarro. La forma en la que abrió la puerta y miró detrás de ella mostraba, claramente, lo intencional que había sido al hacer aquello, por lo que ni siquiera tuvo tiempo de intentar pasar la colilla por el sumidero.

Ese tipo de conductas s...

El enemigo (Parte2)

Continuación con el siguiente contenido: sexo guarro, sadomasoquismo, humillación.

El resto de la meada se le hizo eterna. Su boca se llenaba y apenas era capaz de ir tragando una parte mientras lo sobrante se escurría por las comisuras; el chico se daba perfecta cuenta de ello e iba regándole otras regiones de la cara hasta que veía que de nuevo quedaba vacía y volvía a dirigir ahí el chorro. Tarareaba, al hacerlo, una musiquilla alegre.

Podía verse a sí mismo en el suelo: a cuatro patas, goteando orín, con la cara alzada y los ojos cerrados para protegerse, sí, pero también por la...

El enemigo (Parte 1)

Inicio de un relato con sadomasoquismo, sexo guarro y violación

Pedro se miró al espejo. No estaba seguro de si la camisa le quedaba mejor por dentro o por fuera: llevaba diez minutos metiéndola y sacándola, colocándose de frente, de espaldas y de perfil, comparándose desde todos los ángulos, esperando que en algún momento saltase una alarma que declarase aquella posición como la ideal, pero no estaba sucediendo y finalmente optó, a la vista de las arrugas que se habían ido formando en la parte inferior con motivo de sus intermitencias, ajustársela en el pantalón. Echó...