Las ensoñaciones de Lucía.
Cuando dejas tus miedos en casa, tu nuevo yo puede ser capaz de cosas que no hubieras pensado nunca.(Relato para Lucia Misterio)
Cuando saliste de casa no pensabas en que el nuevo sujetador te picaba. Solo pensabas que ibas a verle, y en si serías capaz de reconocerlo entre la multitud aun cuando un martes a las cuatro tampoco debería haber mucha gente en el cine. Pero no te importaba, Lucía, porque por fin habías cogido tus miedos y los habías metido en un tarro; y ese tarro, después de apretar firmemente la tapa para que los temores no se pudieran escapar, lo habías escondido en el fondo del armario de la cocina, el que no abres pa...