Un verano caliente
A veces pasan cosas, que al principio no gustan y despues se tornan en experiencias que se extrañaran.
En la vista majestuosa del glaciar, mis ojos se llenaban de orgullo por sentir en esa belleza e imponente corteza de hielo , mi manera de gozar en la vida.
A la tarde, ya en el fogón de la cabaña, sentía que mi compañero, pensaba como yo , sexo, acostados los dos desnudos sobre un manto térmico, no tardo de penetrarme y gozar, acabar con tanta gente cerca de uno, no me pareció difícil.
Aproximadamente a las cuatro de la mañana, desperté sobresaltada, por no encontrar a mi compañero dentro d...