El reencuentro
Como se puede querer tanto a una persona... primera parte.
Estaba deseando verla . Más nerviosa de lo que nunca había estado antes me temblaban las piernas.
Aun faltaban horas para verla pero yo acababa de llegar a Vigo, y la verdad no tenia muy claro por donde quedaba el hotel, así que pare con mi coche en una zona cercana al centro y comencé a caminar pensando en como sería el momento en que la viera ¿me reconocería enseguida o tardaría un rato? Observaba cada detalle de la cuidad, imaginándomela a ella recorriendo esas mismas calles, y casi al ins...