El Avión
Un hombre duda si creer su buena suerte cuando otra pasajera en el vuelo transoceánico se arrodilla entre sus piernas para hacerle una mamada.
La situación comienza en un vuelo de Buenos Aires a Madrid. El avión estaba bastante vacío, a mi me había tocado una ventanilla. En eso veo venir por el pasillo a una morena de pelo corto caminando con la sensualidad de una gata. Su pantalón ajustado realzaba su belleza. Un top escotado dejaba ver su ombligo tostado por el sol y sus pechos pequeños y orgullosamente erguidos. Su boca, levemente fruncida en un mohín, era una promesa de placeres futuros.
Disculpa, me dijo con un tono extraño, ¿éste es el...