Mi vecina Maria
Un encuentro entre una mujer de 65 años y un joven de 35.
Todo empezó siendo un dia normal, pero quien me iba a decir a mi que iba a pegar uno de los mejores polvos de mi vida.
Veía a aquella mujer como una vecina mas, una señora mayor que vivía en mi edificio y nada mas. Jamás lo mire las piernas, ni el culo, tampoco las tetas y si digo la verdad, las veces que subíamos en el ascensor, ni le mire la cara, pero ese dia, descubriría el cuerpo de una mujer insatisfecha, y tan insatisfecha a sus 65 años, treinta años mayor que yo.
Yo venia de pasar u...