Gol a gol. Tres besos y un solo final feliz.

Quince adolescentes son convocados por su país para formar una selección de fútbol de jóvenes promesas. Partido a partido, gol a gol, los quince chicos de la concentración verán nacer alianzas, relaciones y promesas. Todo ello aderezado, desde luego, con mucho sexo.

El móvil de Jordan comenzó a sonar con el tono de la alarma a las siete y cincuenta y cinco de la mañana del sábado como si no supiera lo qué era un fin de semana. Aunque tampoco era su culpa, en la concentración para el Torneo Juventud, éstos no existían: el horario era el mismo todos los días. Los despertaban sin falta a las ocho en punto de la mañana poniendo música a todo volumen por la megafonía de los pasillos. Jordan se había despertado el primer día al borde del infarto mientras el atronador *Ave M...

Gol a gol.

Quince adolescentes son convocados por su país para formar una selección de fútbol de jóvenes promesas. Partido a partido, gol a gol, los quince chicos de la concentración verán nacer alianzas, relaciones y promesas. Todo ello aderezado, desde luego, con mucho sexo.

Nathan Swift se miró por enésima vez en el espejo del baño de la habitación 105. El traje gris de corte italiano le sentaba bien. La chaqueta, ligeramente ceñida en forma de uve a la altura de las costillas le quedaba como un guante, así como los pantalones, cuyo dobladillo su madre se había ocupado de coger antes de enviarle en un avión en dirección a la Argentina. La corbata, del mismo tono que el traje, caía con gracia sobre la camisa blanca.

Objetivamente, se repitió, le sentaba bien.

Subjet...

Lucha de clases

Subcategorías: Dominación/No consentido Después de que una visita a su prometida se tuerza irremediablemente, el duque de Galisteo decide descargar su ira contra Tomás, un joven lacayo de la casa.

Gonzalo, duque de Galisteo, bajó del flamante coche negro frente a la gran mansión de los condes de Figuerola. Vestidos con sus mejores galas, le esperaban para recibirlo el conde, la condesa y las dos hijas de éstos, María y Cristina. María, la mayor y su prometida, le dirigió una ligera inclinación de cabeza cuando sus ojos se encontraron mientras él cruzaba el camino de grava para estrecharle la mano a su padre.

El suyo era un compromiso que llevaba concertado dos años. Un día cualquiera de aquello...

Gol a gol. La ducha número cuatro.

Quince adolescentes son convocados por su país para formar una selección de fútbol de jóvenes promesas. Partido a partido, gol a gol, los quince chicos de la concentración verán nacer alianzas, relaciones y promesas. Todo ello aderezado, desde luego, con mucho sexo.

  • ¡Eh, tú! - exclamó Xavier

Mientras el resto de convocados entraban en sus respectivas habitaciones para lavarse los dientes después del desayuno y hacerse la cama antes del primer entrenamiento, Xavier apretó el paso para alcanzar a Jordan.

No habían comentado la noche anterior. Tampoco es que Xavier hubiera tenido la intención de hablar sobre ello largo y tendido, no veía la necesidad de hacerlo, tan solo había querido preguntarle a Jordan por qué se había marchado sin avisar. Pero, claro, en...

Gol a gol. Preámbulo y penumbra.

Quince adolescentes son convocados por su país para formar una selección de fútbol de jóvenes promesas. Partido a partido, gol a gol, los quince chicos de la concentración verán nacer alianzas, relaciones y promesas. Todo ello aderezado, desde luego, con mucho sexo.

A cada segundo que pasaba, Jordan se convencía más y más de que esa era la situación más incómoda de toda su vida. Xavier y él se cubrían como podían con las manos en medio de la pileta, moviendo al mismo tiempo las piernas bajo el agua para no hundirse. No podían salir. Aunque apenas había diez metros entre el borde de la piscina y las tumbonas donde estaba tirada su ropa, bien podría haber habido veinte, treinta o doscientos; la perspectiva de salir desnudos del agua y recorrer ese espacio (¡desnudos!) de...

Gol a gol. Del verbo aprovechar.

Quince adolescentes son convocados por su país para formar una selección de fútbol de jóvenes promesas. Partido a partido, gol a gol, los quince chicos de la concentración verán nacer alianzas, relaciones y promesas. Todo ello aderezado, desde luego, con mucho sexo.

Llegaron a Buenos Aires a las seis de la mañana, hora argentina. Los nueve chicos se despidieron de la azafata que los había acompañado durante el vuelo y, arrastrando las maletas y las ojeras por los pasillos del aeropuerto de Ezeiza, salieron al encuentro de la pequeña delegación que los estaba esperando. Fueron recibidos por cuatro mujeres y dos hombres que abrieron camino hasta un autobús decorado con los flamantes colores de la bandera de España. El viaje hasta el hotel-complejo en el que iban a alojar...

Gol a gol. El asiento del pasillo.

Quince adolescentes son convocados por su país para formar una selección de fútbol de jóvenes promesas. Partido a partido, gol a gol, los quince chicos de la concentración verán nacer alianzas, relaciones y promesas. Todo ello aderezado, desde luego, con mucho sexo.

  • ¡Bueno, mamá, ya vale! - exclamó Xavier escabulléndose de los brazos de su madre

Se pasó la mano por el pelo, revolviéndoselo, y ayudó a Jordan y a su padre  a sacar el equipaje de ambos del maletero. Como los padres de Jordan salían tarde de trabajar y los chicos vivían cerca, la familia de Xavier se había ofrecido a acercarle al aeropuerto a la vez que llevaban a su hijo.

Xavier miró los billetes por enésima vez y comprobó que estaban en la terminal correcta a la hora correcta. El vuelo haci...

Gol a gol

Quince adolescentes son convocados por su país para formar una selección de fútbol de jóvenes promesas. Partido a partido, gol a gol, los quince chicos de la concentración verán nacer alianzas, relaciones y promesas. Todo ello aderezado, desde luego, con mucho sexo.

Jordan trastabilló con algo, quizá uno de los aros de colores que solían utilizar en educación física cuando eran más pequeños, pero eso no hizo que despegara sus labios de los de Xavier. Agarrándole de la camiseta, dio un par de pasos apresurados hacia atrás, hasta que los dos cayeron sobre la pila colchonetas roñosas que se almacenaban al fondo del armario del material.

Jordan ahogó una risa en la boca del otro, y siguió besándole. Su lengua se deslizaba por la de Xavier, ansiosa y apresurada. A fin...