Mi secreto
A Lilibeth que me dijo que detallara más las escenas. Le he hecho caso. Tanto que yo misma me he...
MI SECRETO
Estaba en la gloria. Gloria bendita. Gloria. Para un hombre con mis defectos esto resultaba tan excitante que mi pene martilleaba compulsivo a fuerza de latidos contra el abdomen. Refrotándome el vástago inspiraba el dulce olor a suavizante que desprendían aquellas bragas. Sabía que eran de ella. De Gloria. Blancas. De inmaculado algodón. De blanco virginal. Blanco neutro. Blanco sudoroso por la humedad que todavía desprendían. Blanco algodón protector de joyas. Blancas asépticas de d...