Romina, mi perra sucia (2)
Sigue la saga de Romina.
Romina, mi perra sucia 2
El día siguiente todo transcurrió con normalidad desayunamos juntos muy acaramelados y haciéndonos chistes, felices como siempre. En la tarde cuando volví del trabajo entre a casa y cuando fui a la cocina estaban Carmen y Manuel tomando mate con Romi en la cocina. Romi tenía sus calcitas sin nada debajo y una remera también sin sujetador que dejaba adivinar sus pezones. Me vino a saludar abrazándome fuerte y poniéndose en puntitas de pie dándole una visión de su culo a M...