El vecino
El vecino me sacó de una tarde de aburrimiento con mi marido y suegros en mi casa.
Debían ser las 6 de la tarde de un viernes. Estaba aburrida viendo la televisión con mi marido y con mis suegros. No me mal interpretéis, no es que odie a mis suegros, pero precisamente no es el mejor plan estar un viernes tarde con ellos esperando a que llegue la hora de la cena. La tarde seguía siendo monótona, hasta que Alfonso el vecino llamó a la puerta. Fue Juanjo el primero que hizo ademán de levantarse y mirar por la mirilla. Al momento reconoció a la persona que tenía al otro lado de la puerta. Era...