Arrebatos sexuales II
La pegué contra la pared y lentamente comencé a besarla suavemente sin apuro cosa que la enloqueció y comenzó a besarme más urgida mordiendo mi labio.
UN COMPARTIR DIFERENTE
Viernes de quincena con fin de semana largo, todos estábamos felices en las oficina, nos pusimos de acuerdo y después de las 6pm ya estábamos todos reunidos en casa de un compañero, tomando cervezas, vino, ron y vodka, había variedad para escoger en cuanto a licor, la música sonaba a todo dar, era un ambiente realmente agradable, cuando entró ella, su cabello negro largo suelto, una blusa blanca y un short de cuadros blanco con azul, estaba hermosa y como siempre con su car...