WhatsApp incendiado

Escribir relatos por encargo tiene el riesgo de que el autor no sepa interpretar lo que quiere el destinatario... pero tratar de solucionarlo te lleva a situaciones inseperadamente excitantes

13/3/17 17:48:52: JAPD: Propuesta nueva de encargo de relato en tu e-mail

13/3/17 17:58:57: MJ: Jaja, después me dices que te quiero esclavizar

13/3/17 17:59:34: JAPD: El orgullo que es muy malo

13/3/17 18:00:25: MJ: Jaja, noooo

13/3/17 18:02:36: MJ: No te sientas herido, yo no he dicho que no me gustara, es un relato blanco sin XXX, eso no significa que no esté bien, que lo está

13/3/17 18:04:02: JAPD: Digamos que es X solo

13/3/17 20:18:58: JAPD: Parece que era demasiad...

Reencuentro

Dicen que todo lo que nosotros estamos buscando, también nos busca a nosotros y que, si nos quedamos quietos nos encontrará

De: MJRC mjrc@gmail.com

Para: JAPD japd@yahoo.es

Enviado: lun,20 febrero, 2017 15:28

Asunto: Reencuentro

Hay una autora que me encanta que, en uno de sus libros dice algo que me ha venido a la memoria después de verte hoy:

*"Dicen que todo lo que nosotros estamos buscando, también nos busca a nosotros y que, si nos quedamos quietos nos encontrará. Es algo que lleva mucho tiempo esperándonos. En cuanto llegue, no te muevas. Descansa. Ya verás lo que ocurr...

Mi deseo

En realidad mi deseo es muy primitivo...

MI DESEO

En realidad mi deseo es muy primitivo...

Mi deseo es muy de piel... Tengo que estar en presencia de alguien que lo despierte, y que lo provoque. Sólo así surge y me dicta que hacer....

Mi deseo es avasallador; una vez que se desata, no lo puedo contener, y no puedo evitar dejarme llevar por él, por el impulso, por esa necesidad absoluta de satisfacerlo...

Mi deseo es carnal. Siempre es roce, contacto, piel... nunca quiere quedarse en fantasías, por más que se alimenta de ell...

Tu sonrisa me desarma

“Te confieso que nunca pensé que este momento pudiera llegar, aunque lo haya deseado un millón de veces”. “Admito que nunca se me pasó por la cabeza acceder a una cita así, y mucho menos que fuera a sentirme tan a gusto contigo”.

TU SONRISA ME DESARMA

Aunque no tenía demasiada conciencia de ello, llevaba ya diez minutos sentado en aquella mesa; en realidad no tenía demasiada conciencia de casi nada hasta que en un momento determinado se descubrió a sí mismo removiendo el café con la cucharilla en una mano y agitando casi instintivamente el sobre de azúcar en la otra. Pareció despertar de una especie de trance, se dio cuenta de que no recordaba nada de lo sucedido desde que pidió aquel cortado y supuso que su mirada había...