La caja de Pandora. El asalto

Un padre y su hija son asaltados en plena noche por tres atracadores en su casa de veraneo en Cantabria.

| L |

os golpes resonaron en mitad de la noche como explosiones en la puerta principal hasta que ésta se vino abajo. Después del estruendo, pareció como si una tromba de elefantes corriera por el pasillo de la casa. Antonio despertó bruscamente de su pesado sueño y se levantó de la cama de un salto con los ojos como platos y el corazón a punto de salirse del pecho.

—¿¡Qué ocurre!?, ¿Qué está pasando?, ¿Quién está ahí? —gritó hacia la algarabía del otro lado de la puerta de su dormitorio.

...

El usurpador

Solo quería verla durmiendo. Aunque tal vez un paja frente a su cara...

Era noche cerrada cuando salió de su habitación en camiseta y pantalón de pijama. Le sorprendió ver una luz tenue y titilante iluminando vagamente el recibidor, al fondo del pasillo. Con sigilo atravesó el corredor hasta llegar a la puerta acristalada del salón de donde provenía la luz.

La tenue fuente lumínica no era otra cosa que la pantalla de televisión del salón que alguien visionaba a esas horas y cuyos haces luminosos no solo alumbraban la estancia sino que  traspasaban la cristalera de la puer...

Rencores IV.

El ambiente y el odio de esta familia se enrarecen de nuevo a medida que pasan los días.

La casa se había convertido en una cárcel de solo cuatro reclusos. Se podía decir que incluso había dos pandillas diferenciadas dentro de ella. Por un lado el binomio Madre-hijo, que mantenían una frágil relación sujeta con alfileres. Una relación medianamente estrecha pero llena de altibajos debido, por una parte, al carácter inconstante de Marta, que unas veces veía a su hijo como alguien a quien proteger y otras como alguien de quien protegerse y por otra, a cierto tipo de acciones no siempre muy decoros...

Casamiento Islandés

La noche de bodas no siempre fue un acto exclusivo entre los novios. En algunas culturas fueron los padres quienes acompañaron a sus vástagos en la noche más importante de sus vidas.

Una de esas raras costumbres sociales con las que, de vez en cuando, tenemos la oportunidad de toparnos es la de las antiguas zonas rurales de Islandia en los tiempos en los que un arado de madera era la última tecnología.

Es bien sabido el carácter frío y poco o nada extrovertido de los habitantes nórdicos acentuado, más si cabe, cuando estos individuos conviven en una sociedad poco dada a las relaciones y contactos entre habitantes de una misma comunidad.

Al parecer, el sistema de sustentación...

El liante.

El liante de mi hijo ha preparado un buen embrollo con mi mujer y su hermana.

Quizás no he oído bien o a lo mejor este sol que me achicharra me hace alucinar. Miro a mi hijo por encima del periódico y levanto mis gafas de sol sorprendido.

-¿Qué has dicho?

-Digo que menudas tetas se le han puesto a Nuria.

Está sentado en la toalla frente a mí, con la barbilla descansando en sus manos y los codos apoyados en sus rodillas. Contempla absorto a las 2 mujeres que se alejan caminando por la arena hacia el mar.

Yo también estoy sentado. Utilizo una de esas sillas pleg...

El obseso. Relaciones parentales.

Mi madre está muy rara y no sé como se tomará mi padre lo de esta noche. Joder, a que la he vuelto a liar.

Por primera vez en mucho tiempo el despertador interrumpe mis sueños. Normalmente llevo despabilado un buen rato antes de que suene. Un buen rato en el que me estoy pajeando bajo las sábanas pensando en tetas y coños. Me la meneo hasta que estoy a punto de correrme y justo entonces sujeto la punta de mi prepucio mientras eyaculo almacenando el semen en esa bolsita que forma la punta del pellejo. Después me quedo adormilado hasta que el despertador suena. Lo apago y espero hasta que mi madre entre unos minut...

La señora 11.Favores debidos.

Cada noche es más tortuosa que la anterior y algunos favores deben ser devueltos.

FAVORES DEBIDOS

El día siguiente transcurrió como un día normal en el que todos los integrantes de la familia se ignoraron. Eduard se encerró en su despacho mientras el resto de la familia se perdía por la casa.

Al levantar la vista de su escritorio vio a Berta atravesar la puerta de su despacho y dirigirse hacia él. Continuó leyendo el documento que tenia delante ignorando a su vástaga que se acercaba con paso lento pero firme. Cuando estuvo frente a su padre se mantuvo en pie unos momentos tra...

El obseso. Un pervertido en casa.

Joder, la que le he liado a mi madre. Como mi padre se entere...

Giro la llave intentando no hacer demasiado ruido. No quiero que mis padres me sientan entrar en casa, no soportaría que intentaran darme una charla por lo que pasó la tarde de ayer. Bastante mal lo he pasado hoy durante toda la mañana en clase emparanoiado pensando en que todo el mundo me miraba y sabía lo que había pasado.

Una vez dentro de casa cierro la puerta con sigilo. Nada más comenzar a caminar por el pasillo mis esperanzas de pasar inadvertido se van a la mierda. Me cruzo con mi madre que me...

El obseso. un día de furia.

¿Alguien se ha parado a reflexionar sobre su vida? ¿Lo triste que puede ser pasarse horas leyendo relatos guarros y haciéndose pajas? ¿Qué pasaría si alguien supiera cómo somos realmente? ¿Qué pasaría si despertaríamos al friki que llevamos dentro?

Un día de estos creo que me voy a volver loco. Me paso el día pensando en tías y haciéndome pajas. Dicen que los hombres pensamos unas 50 veces en sexo a lo largo del día. En mi caso yo solo lo hago una, desde que me despierto hasta que me acuesto, 24 horas al día, siete días a la semana. Cada vez que me cruzo con una tía lo primero que hago es mirarle a las tetas o la forma que le dibuja el coño en el pantalón. No puedo evitarlo.

Tengo 25 años y estoy hasta los cojones de seguir siendo virgen. Todaví...

La mujer del empresario. Episodio 3

Han pasado 4 meses desde que Miguel y Perecet follaron a Raquel y a su madre. Ojo, sexo no consentido

EPISODIO  III

EL LÍO

Raquel llevaba varias semanas sin venir a clase. Incluso antes de que dejara de asistir al colegio ya la encontraba rara, apática, sin rastro de su vitalidad y simpatía.

Qué cosas tenía la vida. Había conseguido follársela, nada menos que a la tía más buena y deseada de todo el colegio y ahora va la tía y desaparece. Con lo feliz que era viéndola cada mañana y pensando “te he follado el coño, me he corrido dentro y lo mejor es que tú no lo sabes”. Qué felicidad saber q...