Mi primer amante 2: Descubriendo a Rob
Mire a Eduardo, quien se habia quitado su bata de bano y me miraba exitado. Tenia su verga dura y parada. Mientras me decidia Rob comenzo a besarme con calma y dulzura susurrando que este era un regalo para mi, y que yo merecia esta experiencia.
Una vez que conocí a Rob, mi primer amante, comence a pasar mucho tiempo con el. Nuestros primeros encuentros se limitaron a tener sexo y conocer nuestras preferencias. Explore su verga cuidadosamente, pero nunca llegue hasta su pelvis, pues era bien grande. El, por el contrario, exploro mis limites, llevando a un estado de éxtasis cada vez que estábamos juntos. Mi matrimonio sexualmente era terrible. No tenia deseo por mi marido y el sexo era automático y aburrido.
Con Rob sentia la pasion crece...