Mi preciosa hotwife Escort por una noche
Una hermosa polla negra apuntando al cielo, era muy grande y muy gorda, se acercó a le despacio, se puso de rodillas delante de esa dura polla, la cogió con la mano, y mirándolo a los ojos acerco su boca muy lentamente, la envolvió su suavemente con sus perfectos labios y empezó a comérsela
Estábamos en la cama tumbados, Esther acababa de llegar de estar con su amante todo el fin de semana en la costa. Habían estado intercambiando sus fantasías, Carlos tenía la fantasía de convertirla en su puta por una noche, cuando llego a casa me dijo que quería probar ser su puta. Habías estado visitando una casa de citas que él conocía donde alguna pareja de amigos de él acudían de vez en cuando a sacarse un dinero extra y a saciar la fantasía de ellas de ser Escort por una noche, la tarde que fueron la...