La lección

Mónica nunca se hubiera imaginado que aquella nueva amistad con esa chica acabaría como acabó...

La lección

Nada. Llevaba dos horas paseando por el centro comercial y no encontraba nada que me llamara la atención. Había mirado blusas, minifaldas, hasta zapatos de tacón alto – que nunca me canso de ellos -, pero nada. Mi cura infalible después de un desengaño amoroso no me servía esta vez. Esta vez me había dolido, pues realmente estaba colada por él.

Llevábamos ya un año saliendo juntos. La cosa funcionaba. Yo estaba muy contenta de haber encontrado a Jordi. Nunca me hubiese imaginado...