El directivo, la jefa y el chofer
Un diractivo de una multinacional es obligado a someterse a las perversiones de su nueva jefa ¿Sufrimiento o placer?.
Si alguna cosa he aprendido en esta vida a mis 40 años es que nunca puedes decir que de esta agua no beberé. Soy un hombre felizmente casado, con tres hijos y que siempre había sido fiel en mi matrimonio, mi mujer es la persona más maravillosa del mundo, guapa, inteligente, cariñosa, educada y muy apasionada en la cama, la mujer perfecta. Nunca creí que mi vida pudiera dar un cambio tan radical como hace una semana.
Trabajo en una multinacional, de relaciones públicas para España. Todo empezó el...