El juego del parchís
Unos amigos quedan para jugar al parchís, y la situación se transforma en muy caliente.
Lo que puede dar de sí una inocente reunión de amigos
Un viernes por la noche nos encontrábamos mi novia Mónica y yo en casa de Andreu y Laura, otra pareja de novios amigos nuestros. La velada se iba animando a medida que tomábamos copas. La botella de escocés que habíamos abierto tenía ya más aire que whisky; poco antes, durante la cena, habíamos vaciado otra de Rioja, así que estábamos ya los cuatro bastante alegres, como otras veces había ocurrido cuando nos reuníamos en casa de ellos o en la nue...